miércoles, 27 de febrero de 2008

Repudio a la violencia

La Mesa Nacional de la Coalición Cívica afirmó ayer que "la metodología utilizada para el desalojo de los trabajadores cartoneros por parte del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires no puede pretender obtener justificación moral y resulta intolerable desde el punto de vista ético" al tiempo que lo calificó como "un golpe a gente ya golpeada, marginada y abandonada".

"No se puede destratar y utilizar métodos violentos a quienes han sabido elegir un camino de dignidad en el medio de la indignidad que significa revolver la basura para poder subsistir", sostuvo la Coalición opositora que lidera Elisa Carrió.

La Coalición Cívica propone constituir un equipo de mediación para construir, junto a los cartoneros y a todos los actores, soluciones alternativas que permitan encontrar salidas realistas y consensuadas a los problemas existentes.

"Los cartoneros han sabido darle dignidad y convertir en trabajo a una tarea infrahumana, que es revolver la basura para recuperar valor y con ello sostener a sus familias", sostuvo la Coalición Cívica y agregó que "Es claro que la organización de su trabajo se ha visto amenazada por la suspensión del servicio del llamado tren blanco, sin soluciones alternativas reales para el traslado de los cartoneros hacia sus casas, decisión provocó un golpe a gente ya golpeada, marginada y abandonada".

Para la fuerza opositora "A esta realidad, se le suma la actitud de intolerancia al desalojar a los cartoneros que están allí porque les han quitado sus medios de transporte para poder volver a su casa".

"Los vecinos de Buenos Aires han sabido comprender el estado de crisis durante estos años y estamos convencidos que acompañarán soluciones consensuadas que partan del reconocimiento de los cartoneros en su dignidad humana", concluye la declaración de la Coalición Cívica.

Mesa Política Nacional de la Coalición Cívica